La moda y el lujo sostenibles han recibido una atención cada vez mayor a medida que surgen más investigaciones sobre los efectos nocivos sobre el medio ambiente de las prácticas de abastecimiento, manufactura y envío de la industria. Para combatir estos efectos, algunas marcas están adoptando estrategias de economía circular. En general, una economía circular prolonga la vida útil de un artículo a través de la reparación, la reventa y el reciclaje.
¿Es importante una economía circular?
Según su trayectoria actual, se prevé que las emisiones globales de la industria de la confección crezcan un 50 % para 2030, una tasa que es completamente insostenible para el futuro de nuestro planeta. Cada año, la industria, especialmente la moda rápida, produce 92 millones de toneladas de residuos textiles, el 3 % de las emisiones mundiales de CO2 y el 20 % de la contaminación mundial por residuos, lo que contribuye al rápido deterioro de nuestro planeta.
¿Cuál es el impacto de estas actividades? Después de su largo reinado, la moda rápida está en vías de extinción. El cambio climático, la demanda de los consumidores y las iniciativas gubernamentales están arrojando luz sobre los preocupantes efectos de los residuos de la moda, y están presionando para que la economía circular ocupe su lugar.
En 2022, los ingresos de la economía circular ascendieron a casi XX millones de euros, pero se prevé que esa cifra alcance los XX millones de euros en 2026. Claramente, es hora de que las empresas de ropa comiencen a cambiar la forma en que manufacturan, obtienen y comercializan sus productos, tomando medidas para reciclar, reducir y reutilizar.
Aquí hay cinco cosas que las marcas de ropa con canales de ecommerce DTC para consumidores deben saber sobre la economía circular, incluida la forma en que puede aumentar la lealtad a la marca, mejorar la experiencia del cliente y reducir el impacto medioambiental.
1. Las ventas de segunda mano siguen aumentando
Incluso en una recesión económica, o quizá especialmente en una recesión económica, las ventas de ropa de segunda mano están en una pendiente constante. En 2022, una de cada tres prendas compradas en Estados Unidos eran de segunda mano, y el 75 % de los consumidores han comprado o están abiertos a comprar ropa de segunda mano.
Esas estadísticas son aún más prometedoras con la generación Z. Según se informa, el 83 % del grupo de edad ha comprado y está abierto a comprar ropa de segunda mano. Y dado que las generaciones más jóvenes adoptan rápidamente el ecommerce, no es de extrañar que la reventa en línea sea el sector de más rápido crecimiento del mercado de segunda mano, con ventas que se espera que alcancen los XX millones de euros para 2028 solo en los Estados Unidos.
De hecho, el mercado de ropa de segunda mano está creciendo más rápido que cualquier otro canal en los EE. UU., superando al DTC, las cadenas de valor, la moda rápida y los grandes almacenes entre otros.
2. La gestión de terceros es fundamental para el éxito de la reventa
La reventa es un motor clave de ingresos y crecimiento a largo plazo para las marcas de consumo, ya que más del 80 % de los minoristas de reventa esperan un retorno de la inversión positivo. Pero si el canal no se aborda estratégicamente, lanzar y escalar la reventa puede generar problemas de crecimiento.
No es de extrañar, entonces, que las tiendas de reventa en línea de mayor éixto hayan aprendido rápidamente que la gestión de terceros es fundamental para crecer. Un ejemplo: nueve de las diez principales tiendas de reventa han adoptado un modelo de servicio gestionado, incluidas marcas como Athleta, Merrell y J.Crew. Incluso los minoristas y las marcas con canales de venta DTC de ecommerce sin un programa de reventa entienden los beneficios de un proveedor de servicios externo, y casi el 50 % dice que el modelo es fundamental para el éxito en el crecimiento de la reventa.
Los proveedores externos ayudan a las marcas a agilizar los procesos y acelerar el crecimiento mediante la gestión de cualquier aspecto del proceso de reventa, desde el alojamiento y el lanzamiento del sitio web hasta la comercialización, los pagos, el cumplimiento y el servicio al cliente.
3. Los gobiernos mundiales están interviniendo para apoyar la economía circular
Las generaciones más jóvenes de todo el mundo han expresado una clara demanda de una economía circular, pero la generación Z europea está a la cabeza. Una investigación de McKinsey reveló que el 40 % de los consumidores europeos cree que la sostenibilidad es de gran importancia. Y el 50 % de los consumidores de Europa Occidental han comprado artículos de segunda mano.
En consecuencia, los gobiernos europeos están interviniendo para apoyar estos valores. En 2022, el Ministerio de Medio Ambiente de Dinamarca se asoció con diez empresas textiles y de ropa para poner en marcha una nueva iniciativa ecológica.
Como parte del acuerdo, la ropa de las organizaciones participantes debe estar fabricada con al menos un 40 % de material reciclado para 2030. La iniciativa tiene como objetivo minimizar la cultura de la moda rápida y dar un giro hacia materiales de calidad que estén hechos para durar.
4. Los fabricantes textiles se están volviendo ecológicos
Un número cada vez mayor de consumidores demuestra que está dispuesto a pagar más por productos sostenibles y éticos. Y los fabricantes textiles están compitiendo para adaptarse. Como tal, la legislación gubernamental y las prácticas de la industria tienden hacia iniciativas ecológicas y sostenibles.
En la India, los fabricantes de textiles deben tener plantas de vertido cero para 2030. Los fabricantes del estado indio de Tamil Nadu están liderando la tendencia. Allí, la mayoría de los fabricantes ya han adoptado energía 100 % verde, procesamiento de descarga cero de líquidos y textiles 100 % reciclados con PET.
En Suecia, la empresa de reciclaje textil Renewcell está revolucionando la industria al escalar el reciclaje de pulpa para la producción de viscosa. Los textiles fabricados con pulpa reciclada emitirán cinco veces menos carbono por tonelada y utilizarán un 90 % menos de agua que los fabricados con métodos tradicionales.
Del mismo modo, los fabricantes de denim de todo el mundo están adoptando prácticas ecológicas para apoyar la economía circular. Muchas de las principales marcas de denim del mundo se han unido a la iniciativa The Jeans Redesign de la Fundación Ellen MacArthur. La iniciativa cambia elementos como remaches metálicos, cremalleras, botones para crear un producto más biodegradable.
5. Las reparaciones de ropa van en aumento
Según la Fundación Ellen MacArthur, las reparaciones tienen el potencial de aumentar el uso de un artículo en un 75 % y reducir sus emisiones de carbono en un 30 %. Por lo tanto, en un esfuerzo por combatir los efectos negativos de la moda rápida, muchas marcas están promoviendo las reparaciones de productos en lugar de los reemplazos.
La marca de mezclilla Nudie ofrece un servicio de reparación de por vida en cada par de vaqueros vendidos. Eso permite a los clientes visitar un lugar de reparación o un socio de reparación de Nudie Jeans para costuras y parches, o bien obtener un kit de reparación gratuito por correo.
Los reparadores locales también están experimentando un repunte en el negocio. Las empresas de reparación de ropa como The Seam han informado de un aumento intermensual del 20 % en los clientes desde diciembre de 2021. Eso ha facilitado más de 10 000 reparaciones con reparadores locales en el transcurso de un año.
Los grandes almacenes británicos Selfridges también se sumaron a la tendencia, arreglando 11 150 pares de zapatos entre 2021 y 2022. El gobierno sueco incluso llegó a reducir el IVA para los gastos de reparación. La medida incentiva a más ciudadanos a reutilizar, en lugar de tirar, la ropa desgastada.
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Para las marcas de la industria de la moda que buscan vencer a la competencia, es hora de adoptar la economía circular. Apoya un planeta más saludable, se alinea con los valores de los clientes y puede impulsar los ingresos.
Si tu marca está lista para involucrarse en la economía circular y mejorar los esfuerzos de sostenibilidad, deja que ESW te ayude. Como socio clave de las principales empresas de ropa del mundo, ayudamos a las marcas a reducir su huella de carbono, lanzar sitios web de reventa, compensar el 100 % de las emisiones de entrega y mucho más.
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